

Los participantes del encuentro observaron que la suspensión de los encuentros federales ha generado preocupación entre los equipos provinciales, que advierten sobre el vaciamiento de las políticas de cuidado y atención en salud mental.
También coincidieron en la necesidad de sostener el carácter federal del abordaje, reforzar la solidaridad entre provincias y defender la salud pública como derecho.
Además se revisaron balances, acuerdos y proyecciones que serán publicados próximamente en un documento oficial, en el que se alertará sobre la gravedad de la crisis que atraviesa la salud mental en Argentina.
El licenciado De Piero agregó que en la reunión también se acordó la conformación de una base de datos que contenga información para facilitar las rotaciones en RISAM y favorecer la continuidad del sistema de residencias.
Junto a Tierra del Fuego participaron representantes de Buenos Aires, Córdoba, Santa Fe, La Pampa, Misiones, Formosa, San Luis, La Rioja, Santiago del Estero, Tucumán, Río Negro, Neuquén y Santa Cruz; además del Consejo Consultivo Honorario en Salud Mental y el Órgano de Revisión Nacional de la Ley de Salud Mental.
Cabe subrayar que, en conjunto, estas jurisdicciones representan cerca del 70 % del país.